Esteban Miroli: “con tantas muertes todos hablamos, pero enseguida nos olvidamos del drama de la droga”

miroliEl doctor Esteban Miroli, especialista en el tema de adicciones, habló en exclusiva con Radio Dos donde se refirió al caso de la fiesta electrónica donde murieron cinco jóvenes y otros cinco más quedaron internados en grave estado por el consumo de drogas de diseño. “Estas son las droga de la clase media alta… de jóvenes con alto poder adquisitivo, que no tienen contención ya que el Estado no llega a los country”, dijo. Para Miroli “la responsabilidad del Estado es indeclinable”
“A fines de los 90 se dio la primera catástrofe por muerte en fiesta electrónica, se vio en villas veraniegas en Gesell, Miramar, son drogas de la clase media alta, y un titular de diario decía ‘llego el éxtasis a la Argentina, la droga del amor’ daban ganas de comprarla. Ya había producido estos efectos esta droga en Barcelona, Alemania, Ámsterdan y ahora en Argentina” comentó Esteban Miroli, en una charla en exclusiva para Radio Dos.
“Y volverá a suceder, y las pastillas serán llamadas Superman, Batman, Robin, Flash, para hacer creer que podes volar, las drogas que se plantan se pueden ver con Google Heart en cada casa, por eso el narcotráfico dejó ese negocio a las bandas locales. Pero las drogas de diseño se fabrican en un sótano, donde no se ve con un dron”, precisó.
Miroli graficó que los laboratorios que arman las drogas “mezclan un radical químico, le agregan otro radical, y tienen éxtasis, y dicen: lo voy a probar en terreno, en compradores, y al otro día si es eficiente según cuánto vendió, y ve cuántos murieron, cuántos quedaron internados” graficó.
“Esas son las drogas de diseño, de ahora, no están en villas marginales, están en la clase media y alta… están en villas pero en Villa Carlos Paz, Villa La Angostura, Villa Gessel”, graficó
Y agregó: “en las villas marginales va un Ministerio de Acción Social, de Salud… hay asistencia, hay curas villeros, para mostrar cómo se preocupan. Pero no en los country, no hay curas countrieros, no hay asistencia para la clase alta” enfatizó.
“No sé por qué dicen que la droga daña el cerebro, la droga no daña el cerebro, daña todos los órganos, dañan personas enteras” remarcó.
Responsabilidad del Estado
“El combate a la venta y delitos conexos es inclaudicable, y hay que evitar todo tipo de lavado de activos. El narcotráfico quiere dinero, pero si no puede ser legitimado no sirve. Se pueden tomar dos caminos legalizar la droga, con publicidad, consumo masivo, y la otra es abrir circuitos de lavado de dinero” consideró.
Responsabilidad de los padres
“Hay que dejar de ser padres, y ser mamá… papá, tener otra dimensión de relación, y no tiene nada que ver con el romanticismo, ser papá y mamá significa educar al niño enseñándole a quererse no a querer destruirse, poner límites, cuidar la vida de los hijos” mantuvo.
“Y si mi hijo va a ir a una fiesta electrónica donde se venden este tipo de drogas, poner límites, no importa si se enojan” expresó.
“Hay que pasarle bomba, pero no bombeado, reírse, pero no que se rían de vos… yo a los chicos correntinos les digo: andá con un amigo y volvé con más amigos, no un domingo volver con un cajón de un amigo que murió. Decí: ‘sí quiero pasarla bomba, divertirme, llenarme de amigos” destacó.
“Cuando sale un hijo hay que confiar en él, no hay que encerrarlo en el baño, seguramente alguna macana va a hacer, pero tenemos que confiar en él” mantuvo.
“En este tipo de situaciones que nos duelen a todos los argentinos, tenemos que pedirle a las autoridades que haya servicio de emergencias, que haya suero, con desfibrilador, cuando apenas ocurre el hecho se pueda hacer algo hasta que lleguen las ambulancias” opinó.
“Cuando ocurren tres o cuatro muertes se asustan, después se olvidan, falta una estrategia cambiante, programa de estado que sigan en el tiempo, con visión académica, estratégica, continua, mover nosotros al sistema y ponerlo en jaque” remarcó.
“Además en esta fiesta, también hubo mujeres embarazadas, que consumieron y no se murieron ellas, pero si dejaron en terapia a sus embriones, a sus hijos en las panzas” cerró el doctor Miroli.

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