El ajuste económico debería empezar por la clase dirigente
El obispo auxiliar José Adolfo Larregain reflexionó junto a época sobre la convulsionada escena socio-económica del país. Sin medias tintas, el religioso pidió medidas urgentes y certeras para salir de la crisis, que cada día le hace más difícil la vida a las familias argentinas.
El Gobierno nacional define, este fin de semana, nombres y medidas políticas para reordenar el gabinete de Alberto Fernández. El mes de julio fue realmente caótico, con ingresos y salidas de funcionarios en áreas clave que no hicieron más que profundizar la crisis socio-económica en la que se halla inmerso el país.
En este contexto, ayer la Iglesia reclamó la creación de empleo y denunció una "inflación asfixiante que genera miseria" (ver recuadro). A nivel local, época dialogó con el obispo auxiliar de Corrientes José Adolfo Larregain, quien dio su visión ante el "aquí y ahora" de Argentina.
"La realidad actual del país es muy compleja y estamos ante un problema eminentemente político, que requiere acuerdos y soluciones de fondo. No se deben buscar parches momentáneos, hacen falta respuestas rápidas y certeras", dijo a modo iniciático el pastor.
En esa tesitura, amplió que "se precisa una reingenieria para armar una estructura estatal que gestione una política económica que garantice una solución urgente a los problemas que atraviesa la sociedad. Especialmente los sectores más pobres, los que sufren y padecen mayor vulnerabilidad, los más expuestos".
Sobre la clase política, dijo: "Por lo que uno ve y escucha, parece que cada cual tira para su sector, sin importarle los intereses comunes y sociales. Los cambios de gabinete muestran eso. Deben dejar de lado las actitudes egoístas y promover que, entre todos, caminemos juntos y nos pongamos la patria al hombro para salir de esta crisis".
En otro tramo de la comunicación con este matutino, el Obispo Auxiliar cuestiona: "¿Nadie se preguntó quiénes pagan los costos de las decisiones que toman unos pocos?". Con ese rigor, acotó: "Las personas de campo tienen una frase sabia: ‘Se le pega siempre al buey que tira, para qué le vamos a pegar al que no tira".
A párrafo seguido, profundizó su idea y planteo: "¿A qué sectores se le pide un nuevo esfuerzo o un sacrificio? Siempre es a los mismos: a los más pobres y vulnerables. Sería lindo y ejemplificador que comenzara a hacerlo la clase política. La solidaridad y el ajuste económico debería empezar por la clase dirigente. Nos haría mucho bien a los argentinos para volver a recuperar la credibilidad".
Larregain reconoció que la situación es mucho más compleja de lo que varios creen e insistió en que no hay tiempo que perder. "La inflación crece y la economía está parada tras dos años de una pandemia que nadie esperaba. El problema no es menor, requiere de medidas urgentes y, por sobre todo, que surtan el efecto esperado".
FUENTE: www.diarioepoca.com