Asumió Monseñor Montini como nuevo Obispo de la Diócesis de Santo Tomé
Una multitud se congregó para la misa en el atrio de la catedral, de la que participaron autoridades provinciales, municipales y el representante del Papa Francisco. Llamó a la unión de la región y a “ser puentes de encuentro”. Desde cada parroquia y localidad le regalaron productos típicos y le dieron la bienvenida como pastor.
Gustavo Montini asumió como obispo de la Diócesis de Santo Tomé, en una misa que se realizó en el atrio de la catedral Inmaculada Concepción, convirtiéndose en el quinto religioso al frente de esta jurisdicción eclesial, por designación del Papa Francisco.
Una multitud se congregó llegada la tarde, para participar de este momento histórico para la Iglesia Católica en esta parte de la provincia, por lo que desde diferentes lugares de llegaron delegaciones de sacerdotes y laicos, así como obispos de diversas parte del país. La máxima autoridad eclesial fue el nuncio apostólico -representante diplomático del Vaticano-, Emil Paul Tscherrig; por la Provincia de Corrientes estuvo el vicegobernador, Gustavo Canteros; por la del Chaco, el gobernador, Domingo Peppo (oriundo de Santo Tomé); el intendente, Víctor Giraud, entre otros funcionarios municipales, de fuerzas de seguridad e instituciones locales.
El inicio de la ceremonia religiosa estuvo a cargo del arzobispo de Corrientes, Andrés Stanovnik, quien saludó al Nuncio Apostólico y destacó su presencia, al decir que “su persona nos hace cercanos al Papa francisco, prometemos rezar por sus intenciones”. También agradeció la participación del antecesor de Montini, Hugo Santiago, y mencionó que los une “la amistad episcopal que cosechamos en estos años, su paciencia pastoral, su claridad en la gestión eclesial, que le dieron a esta iglesia un sello de comunión y misión que seguramente seguirá desarrollando monseñor Montini”.
Saludo del Papa Francisco
Por su parte, Emil Paul Tscherrig, dijo: “Los saludo a todos en nombre del Papa Francisco, que les manda su bendición apostólica y su cercanía”. Seguidamente explicó que “Gustavo inicia su ministerio como un eslabón de una cadena de obispos, que el Papa lo llamó para continuar la misión de monseñor Santiago”. Y añadió: “Quiero agradecer a Gustavo por aceptar esta nueva designación con espíritu de servicio y obediencia”.
Seguidamente, siguiendo con el rito eclesial, el sacerdote Héctor Aguirre, quien hasta ayer ofició de administrador diocesano, solicitó a Stanovnik la toma de la posesión por parte de Montini, para lo cual intercambiaron un diálogo específico.
A continuación, el nuevo obispo recibió el báculo (bastón que identifica el servicio pastoral) y formalizó su cargo en la sede de la catedral. Cada uno de estos gestos fue acompañado por los aplausos del público. Para finalizar este segmento del protocolo, los sacerdotes se acercaron a saludar a Montini.
Primer mensaje
Tras la lectura del Evangelio, el nuevo Obispo estuvo a cargo del mensaje, y comenzó diciendo: “Agradezco por acompañarnos, no por acompañarme”, haciendo alusión a que es una celebración comunitaria, no personal. Y aludió a la diócesis santotomeña y al “Año de la Misericordia” que conmemoró en 2016 la Iglesia Católica. En tal sentido, dijo que “Santo Tomé tuvo un camino propio, la designación del obispo Santiago (a la diócesis de San Nicolás), el tiempo vacante, todo es signo de ese camino, silencioso y oculto, que quiere hacer de esta iglesia, hombres y mujeres misericordiosos como el Padre (Dios)”.
Continuando en su reflexión expresó: “¿Cómo es una iglesia cuyo estilo de vida es la misericordia? y frente a esta pregunta propongo tres posibles caminos: una Iglesia misericordiosa, es alegre, también que vive su vocación, y una iglesia pobre para los pobres”.
Poniendo ejemplos, dijo que “el Cura Brochero, la beata Mama Antula son un GPS seguro, ambos se convirtieron en lugares de encuentro, de aprendizaje y partida”, e invocó a la Virgen de Itatí para que Santo Tomé “sea un mar de misericordia en este mar de indiferencia”.
Fuente: EL LITORAL