La familia debe educar en las emociones
En la columna de Psicología de todos los martes del programa “El Momento Justo” el psicólogo Gastón Federico Sal, habló sobre una problemática que afecta a muchos deportistas en la actualidad. "La familia debe educar en las emociones".
La familia es el primer grupo social al que una persona pertenece, la primera escuela, y los padres son los que se ocuparan de guiar a sus hijos desde el momento de la concepción en adelante.
Los niños deben aprender a manejar sus emociones y a expresarlas sanamente, un niño que sabe vivir a través de ellas es un niño que tendrá un futuro exitoso asegurado. Diversos estudios han demostrado que en la actualidad la inteligencia emocional es tan importante como la racional, por lo tanto es necesario que sepamos que las emociones son parte fundamental de la vida de las personas, no solo para la salud mental sino también para poder alcanzar los objetivos que se propongan en la vida.
Los niños, especialmente en su etapa de crecimiento, absorben todo lo que ven y escuchan. Por eso, es esencial que en este periodo de sus vidas los padres estén presentes, con su compañía, pero ante todo con los consejos y el apoyo para que los pequeños tengan un desarrollo adecuado. No importa el tipo de familia que un pequeño posea, puede ser tradicional, monoparental, nuclear, extensa, ensamblada u homoparental, lo que realmente importa es que esta familia le otorgue lo que necesita, no solo desde lo material o nutricional sino también desde las emociones, el efecto, los sentimientos, solo así podrá alcanzar con plenitud la felicidad.
Las emociones están puestas por la naturaleza, es parte esencial de cada uno, lo importante es saber expresarlas adecuadamente en tiempo y espacio con la persona o momento oportuno, porque la represión o expresión inadecuada de ellos crea con el paso de los años dificultades psicológicas.
La educación emocional es una responsabilidad de la familia y también lo es enseñar a los hijos a expresar, aceptar y regular sus propias emociones y la de los demás y aportarles valores, conocimientos y destrezas para su bienestar personal.
Algunas claves para desarrollar las emociones en nuestros hijos:
· Enseñarles a identificar las propias emociones, esto tiene que ver con la conciencia emocional, los padres son modelos de comportamiento para ellos, deben guiarlos para que aprendan a verbalizar lo que sienten.
· Ayudarles a gestionar las emociones, esto significa saber identificarlas, que puedan entender cómo se sienten y aceptarlas.
· Trabajar la empatía, ese sentimiento que los ayuda a ponerse en el lugar del otro para entenderlo.
· Estimularlos con actividades recreativas que les ayude a desarrollar emociones, música, baile, canto, dibujo, lectura, cuidado de animales y la naturaleza, así como también el respeto hacia las demás personas.
· Propiciar el contacto, las caricias, abrazos y las palabras afectuosas son modos esenciales para potenciar la salud emocional, el niño se sentirá seguro y querido.
El objetivo de desarrollar la inteligencia emocional en los hijos se hace necesario para que estos puedan alcanzar el bienestar a lo largo de toda la vida.
La familia debe educar en las emociones
La familia es el primer grupo social al que una persona pertenece, la primera escuela, y los padres son los que se ocuparan de guiar a sus hijos desde el momento de la concepción en adelante.
Los niños deben aprender a manejar sus emociones y a expresarlas sanamente, un niño que sabe vivir a través de ellas es un niño que tendrá un futuro exitoso asegurado. Diversos estudios han demostrado que en la actualidad la inteligencia emocional es tan importante como la racional, por lo tanto es necesario que sepamos que las emociones son parte fundamental de la vida de las personas, no solo para la salud mental sino también para poder alcanzar los objetivos que se propongan en la vida.
Los niños, especialmente en su etapa de crecimiento, absorben todo lo que ven y escuchan. Por eso, es esencial que en este periodo de sus vidas los padres estén presentes, con su compañía, pero ante todo con los consejos y el apoyo para que los pequeños tengan un desarrollo adecuado. No importa el tipo de familia que un pequeño posea, puede ser tradicional, monoparental, nuclear, extensa, ensamblada u homoparental, lo que realmente importa es que esta familia le otorgue lo que necesita, no solo desde lo material o nutricional sino también desde las emociones, el efecto, los sentimientos, solo así podrá alcanzar con plenitud la felicidad.
Las emociones están puestas por la naturaleza, es parte esencial de cada uno, lo importante es saber expresarlas adecuadamente en tiempo y espacio con la persona o momento oportuno, porque la represión o expresión inadecuada de ellos crea con el paso de los años dificultades psicológicas.
La educación emocional es una responsabilidad de la familia y también lo es enseñar a los hijos a expresar, aceptar y regular sus propias emociones y la de los demás y aportarles valores, conocimientos y destrezas para su bienestar personal.
Algunas claves para desarrollar las emociones en nuestros hijos:
· Enseñarles a identificar las propias emociones, esto tiene que ver con la conciencia emocional, los padres son modelos de comportamiento para ellos, deben guiarlos para que aprendan a verbalizar lo que sienten.
· Ayudarles a gestionar las emociones, esto significa saber identificarlas, que puedan entender cómo se sienten y aceptarlas.
· Trabajar la empatía, ese sentimiento que los ayuda a ponerse en el lugar del otro para entenderlo.
· Estimularlos con actividades recreativas que les ayude a desarrollar emociones, música, baile, canto, dibujo, lectura, cuidado de animales y la naturaleza, así como también el respeto hacia las demás personas.
· Propiciar el contacto, las caricias, abrazos y las palabras afectuosas son modos esenciales para potenciar la salud emocional, el niño se sentirá seguro y querido.
El objetivo de desarrollar la inteligencia emocional en los hijos se hace necesario para que estos puedan alcanzar el bienestar a lo largo de toda la vida.